Si es la primera vez es normal que surjan algunas preguntas pero para que esté preparado, le resolvemos cinco cuestiones básicas para disfrutar de la experiencia Oasis. Eso sí, cualquier otra consulta no dude en preguntarnos.

Habitualmente se suele creer que sí pero la verdad es que no. Cierto es que usamos diferentes tipos de especias que le pueden aportar, a según que platos, un toque picantón. No obstante, si no te gusta esa sensación, sólo hay que decirlo. Y en caso contrario, lo mismo, alguna salsa tenemos que le pueda gustar.

Hasta el más afanado experto gastronómico ha caído en el equívoco alguna vez ya que suele ser una confusión habitual pero nada tienen que ver. Una cosa son las brochetas y otra muy distinta el pequeño trozo de carne especiada, bien de cordero, ternera o kefta (mezcla de carne picada con especias), del clásico pinchito moruno realizado a la brasa del anafe.

Es uno de nuestros platos con más seguidores y se dice bastela, no pastela, que suele ser una equivocación común. De forma redonda y aspecto parecido a una tarta pero no es el postre, se rellena normalmente de pollo, aunque también puede ser de pescado, gambas y calamar o verduras. Tras hornearse, se cubre de azúcar glas y canela. Cuando se corta, llama la atención el crujir del hojaldre pero una vez en boca, los diferentes matices de su contenido terminan por enamorar. ¡Ah! Y es necesario encargarla previamente.

Las breuas son muy parecidas a las bastelas pero no hace falta encargarlas y se pueden tomar de forma individual. De un tamaño más reducido, también se trata de un hojaldre pero con forma triangular en lugar de redonda. De diferentes tipos, comparten con las bastelas el momento crujiente cuando se cortan. Y sí, también se les coge cariño.

Nos alegra que nos haga esa pregunta. Además de la capital de Estonia, el tallín es un recipiente de barro cocido que consta de un plato hondo, una especie de cazuela donde se cocina y cuya tapa, de forma cónica, permite mantener la temperatura y las propiedades de cada alimento. Un regalo que una vez abierto, se disfruta con vista, olfato y gusto.